(4 porciones)
Dificultad: *
Para dar un toque diferente y delicioso a la clásica gelatina de leche, usa nuestra crema de limón: le dará un sabor inesperado y acidito. Puedes prepararla en porciones individuales en tus copas de postre favoritas e incluso usar tarros de Lemonella vacíos. También puedes usar un molde cuadrado y servirla cortada en cubos, o en un molde de gelatina y agregar una ligera capa de Lemonella para decorar junto con la menta: los sabores gelatina, Lemonella y menta son una bomba que estallará en tu paladar.
Ingredientes:
+ 1 sobre de 7 g de grenetina
+ 3 cucharadas de agua (45 ml)
+ 1 taza de leche
+ 1 lata de 225 g de media crema
+ 1 frasco de Lemonella
+ Hojitas de menta o hierbabuena para decorar
Preparación:
- Hidrata la grenetina: en 3 cucharadas de agua fría incorpora la grenetina en polvo, bate con un tenedor y deja reposar 10 minutos. Una vez hidratada, derrítela poco a poco ya sea a baño María o en el microondas, en lapsos de 5 segundos para que no hierva.
- En la batidora o en la licuadora, coloca la leche e incorpora lentamente la grenetina en forma de hilo, mientras bates, para que se mezclen homogéneamente y no encuentres plastas de grenetina en el postre (si algo sale mal, siempre puedes colarla).
- Incorpora ¾ partes del frasco de Lemonella y la lata de media crema mientras continúas batiendo durante un par de minutos más.
- Vacía en los moldes que prefieras y refrigera por unas horas, o de un día para otro.
- Poco tiempo antes de servir puedes decorar con la Lemonella restante, dibujando con una duya, o esparciendo una ligera capa sobre la gelatina. Lava y desinfecta la menta con antelación y decora a tu gusto con las hojitas sobre la Lemonella: ¡tu imaginación es el límite!